Creo que no me gusta sentir descontrol, no me gusta que se me acelere el corazón o sonrojarme por esas cosas que no controlo yo. Intento ser perfecta siendo imperfecta pero especial, y eso es algo difícil de alcanzar.
PARA-PARA-PARADISE
PARA-PARA-PARADISE
martes, 27 de septiembre de 2011
lunes, 26 de septiembre de 2011
Silly
La cocina estaba bañada por unos débiles rayos de sol que traspasaban la cortina blanca, iluminando los muebles. Ella entró seguida por él, como si estuviese disfrutando de una obra de arte en un museo. Ella se apoyó en la encimera y lo encaró:
-¿Qué somos?
La pregunta iba acompañada de una pequeña sonrisa.
-¿Tú que crees que somos?
-Somos... amigos, ¿cierto? -Él dejó caer la mano que se disponía a colocarle bien un mechón de pelo oscuro.
-Sí, somos amigos.
-¿Y algo más? -Ahora soltaba una leve carcajada, le parecía una pregunta un tanto.. estúpida. Sería la timidez, que quería estar presente. Ni siquiera se habían besado, ¿sería algo descarado? ¿precipitado? ¿irreal?
Él la miró.
-Somos lo que tú quieras -La miró pensativo, y añadió-. No creo que tengamos una etiqueta, en realidad.
-Me parece perfecto.
-¿Qué somos?
La pregunta iba acompañada de una pequeña sonrisa.
-¿Tú que crees que somos?
-Somos... amigos, ¿cierto? -Él dejó caer la mano que se disponía a colocarle bien un mechón de pelo oscuro.
-Sí, somos amigos.
-¿Y algo más? -Ahora soltaba una leve carcajada, le parecía una pregunta un tanto.. estúpida. Sería la timidez, que quería estar presente. Ni siquiera se habían besado, ¿sería algo descarado? ¿precipitado? ¿irreal?
Él la miró.
-Somos lo que tú quieras -La miró pensativo, y añadió-. No creo que tengamos una etiqueta, en realidad.
-Me parece perfecto.
domingo, 25 de septiembre de 2011
viernes, 23 de septiembre de 2011
Feels like I'm losing
something already lost.
Sentirse sola. No ver a todo el mundo que siempre veía, mi pequeño mundo, mi pequeño trocito de mundo. Aquellos que estaban siempre allí, esas risas que duraban toda una mañana, abrazos que te dejaban sin respiración, uno tras otro. Confianza, charlas sin importancia, cariño. Lo echo de menos. Ya lo he perdido, ¿no?
miércoles, 21 de septiembre de 2011
Soy complicada, lo admito. Me enfado si me discutes cosas que me parecen mal, si faltas a mis principios o si me mientes. Claro que lo perdono todo, porque así como me enfado, perdono. Tal vez perdone a algunas personas demasiado a la ligera. No fumo, no bebo, ni me drogo; odio todo eso. Soy lo que se dice "de risa fácil". Sé reirme de mi misma, y en realidad no me tengo en mucha estima. Me encanta hablar de mí misma, pero a veces mataría por escuchar como se sienten otros. Tengo mucha empatía, me emociono con facilidad, pero no soy una llorona. La música es mi vida; canto en la ducha acompañada de un altavoz al máximo volumen, toco la guitarra que en realidad no sé tocar, pero me encanta pensar que sí. Adoro todo lo que tenga que ver con estar detrás de una cámara de fotos, y no me gusta mucho estar delante si no es para recordar. Tengo mala memoria y soy muy despitada. Me encanta pensar que soy especial y no me voy a parar a comprobar si es cierto. Hay alguien, claro que hay alguien. Hay alguien en mi corazón. Hay mucha gente, de hecho. Son mi mundo. Pero hay unos pocos que son más especiales que los demás, aunque no me guste gerarquizar. Son diferentes. Hay especialmente una persona que me desarma con una mirada. Es la persona que tiene mi sonido favorito en el mundo, la que comprendo con sólo mirar. No logro ignorarle, aunque a veces se porte mal conmigo. Y a pesar de que muchos están de acuerdo conmigo cuando digo que me quiere cuando le viene bien, a veces demuestra estar realmente ahí. No me presta la atención que le pido, pero es normal: pido demasiada. Me gustaría ser única para él, ser tan especial como él lo es para mí. No sé si lo soy ya, si lo seré o si nunca lo fui. Cada vez que discutimos, sueño con él y ese sueño me persigue cada segundo mientras estoy despierta, y aunque tenga toda la razón o no tenga ninguna, tengo que repetirle "te quiero". Seguramente para él no signifique nada, pero a mi me encantaría que él lo hiciera, que dijera eso siendo verdad. Tal vez algún día deje de doler que el diga "te quiero" a la menos indicada, tal vez. No duele, molesta.
Una casita amarilla, rodeada por un adro, un patio, una huerta, un lavadero, un corral. Un granero. La puerta era marrón y de madera maciza, y daba entrada al pasillo. A mí me parecía enorme la estancia, un suelo que intentaba simular piedra, unos muebles, unas puertas... La cocina, a la antigua, con televisión y un pequeño sofá rojo. La cocina de hierro en el medio con todo un asiento alrededor. No me solía gustar la comida, pero nunca he comido bien. Recuerdo a mi abuela haciendo las camas, el baño en tonos azules en el que hacía mucho frío, la cama donde él dormía. Lavar las manos en el lavadero, verla a ella recoger los huevos y escapar del perro.
Todo ha cambiado tanto... Todo se ha vuelto más pequeño pero nada ha cambiado de tamaño. Un tabique por aquí, cemento encima de la tierra y pintura nueva. Nunca creí que se le podría coger cariño a sitios como ese, que apenas recuerdas, y que tras verlos irreconocibles añoras lo anterior, sobretodo a los que ya no están.
Todo ha cambiado tanto... Todo se ha vuelto más pequeño pero nada ha cambiado de tamaño. Un tabique por aquí, cemento encima de la tierra y pintura nueva. Nunca creí que se le podría coger cariño a sitios como ese, que apenas recuerdas, y que tras verlos irreconocibles añoras lo anterior, sobretodo a los que ya no están.
sábado, 17 de septiembre de 2011
Sigo esperando aquello que me prometiste: hablar de mí. También sigo pensando que te da vergüenza, que te importa demasiado lo que los demás piensen, aunque a veces lo nieges.
Prometo hacerte sentir orgulloso de mí. Que no te importe llevarme de la mano, que no te importe decir que me quieres. Para mí eso es afirmarlo realmente, ¿sabes? Es creérmelo un poquito más... Más bien, sería. Sí, cambia todos los verbos a condicional, porque nada de esto ha pasado en otro lugar, fuera de mi imaginación.
Sé perfectamente qué somos y qué no.
Sé cuánto te quiero y a la vez no lo sé; no sé nada. ¿Puedo pedirte que me quieras un poquito más? O que me lo demuestres, o me lo digas. O al menos, no hagas menos. ¿Puedo pedir que sea así siempre? ¿Tengo el derecho de desear que esto no cambie? ¿Significa esto que va a cambiar?
A pesar de todo, tengo la certeza de que te gusta verme feliz.
jueves, 15 de septiembre de 2011
domingo, 11 de septiembre de 2011
Love is our resistance.
Nunca te contaré mi pequeña idea, lo que creo que en el fondo está pasando. Es una de las cosas que forman poco a poco aquella montaña que se ve a lo lejos, ¿ves? Son todas las cosas que nunca te he dicho.
Aunque para algunas, sólo tienes que preguntar.
Aunque para algunas, sólo tienes que preguntar.
sábado, 10 de septiembre de 2011
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