Un día, algo así como a principios de agosto, lo vi en la playa, con más amigos. Pensé realmente que estaba enfadado. ¿Qué pasaba? Todavía no lo sé. ¿Lo peor? No recuerdo como era antes. Ese día fue él mismo por momentos. Ese día y los que siguieron. Unos minutos era mi igual, mi especial, y otros... no. Esa noche, la mayoría del tiempo era él. Y así continuó. Al principio me asusté. Me costó, pero ya estoy acostumbrada. Le gustó una, una que para mí es todo menos bonita. Le dije que no era buena persona; me creó problemas. Discusiones, mil. Al final, hirió a mis amigos, y evité todas las ganas de decir "Te lo dije". Ahora, tiene otra novia. No creo que sea mala persona, no creo que se parezca mucho ni a su ex ni a la que le gustó. Lo siento, pero no creo que dure tampoco. Ella es... pequeña. Es Zara. Es una copia de muchas otras, con mucho dinero y maquillaje a los 14.
He de añadir que no estoy enamorada ahora mismo. Ni de él ni de los otros que me han herido. Le quiero mucho, muchísimo. Pero no es la persona de la que me enamoré. Es diferente.
Sólo espero no perderlo. Que recuerde cómo era. Cómo fue. Cómo éramos. Que lo recuerde, que lo eche de menos. Quiero volver, quiero ser nosotros. Por favor...
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